En Términos generales de la lengua española, se trata de una virtud que, si bien es muy popular, es muy difícil de cultivar, se trata de saber sufrir con resignación y saber esperar con tranquilidad, controlar el desespero y la ansiedad, controlar la inquietud y la impaciencia, saber estar tranquilo ante situaciones que resultan tentadoras y provocativas.
La Paciencia en la Ira
Todos en algún momento hemos sentido ira, rabia, molestia extrema hacia alguien o algo, pero indudablemente pocos sabemos controlarnos. Para controlarse ante una situación que nos irrita, primero debemos ser conscientes que la agresión nada bueno trae y segundo debemos considerar el daño (moral, legal, social, mental, etc) que podríamos causar y causarnos si reaccionamos mal ante dicha situación.
La Paciencia en la Injusticia
Tampoco es ajeno a ninguno de nosotros, atravesar por situaciones donde la injusticia nos hace víctimas, sin embargo, debemos estar al margen de las acciones consideradas saludables, no debemos tomar la justicia por nuestras manos ni intentar causar daño a nadie, recordemos que el karma existe, que la vida es un ciclo y que en cualquier momento gira la rueda, para darte la dicha y darle el sufrimiento a quien te hizo daño en la vuelta anterior.
La Paciencia en la Desesperación
En este mundo lleno de millones de personas, ocurren millones de situaciones, y en algún momento podríamos caer en la desesperación, es allí, cuando más necesitamos de la paciencia, no debemos tomar decisiones con el dolor en la mente o con la tristeza en el corazón.
En conclusión, es vital, si queremos tener un larga y dichosa vida, saber actuar ante miles de situaciones adversas y situaciones que son afortunadas, por que a pesar de que la vida nos favorezca, porque al tomar una decisión apresurada o sin pensar en consecuencias podríamos estar caminando hacia el abismo, tengamos paciencia y las respuestas aparecerán.
