El motivo que impulsó a Amelia Earhart fue un vuelo turístico de 10 minutos en el que descubrió su destino y la llevo a embarcarse en una carrera acelerada, dicha carrera la llevo a convertirse en la primera mujer aviadora capaz de cruzar el Atlántico, haciéndolo en solitario y además sobrevoló el Océano Pacífico desde Honolulu hasta California, convirtiéndose en un ídolo para su nación.
Amelia logró cruzar el Atlántico gracias a una propuesta hecha por el Capitán H.H. Railey, esta consistía en hacer un vuelo desde Estados Unidos a Europa, vuelo que la convertiría en la primera mujer en cruzar el Océano Atlántico. Para Earhart esto fue un reto, en especial después que había batido varios récords de velocidad, queriendo ser la primera en realizar este vuelo, sobretodo porque en 1932 nadie había hecho un viaje en solitario y pudo llegar a su destino.
Se dice que Amelia Earhart logró esta hazaña gracias a que se mantenía despierta oliendo sales, no tomaba café y té como lo hacían el resto de los aviadores, además, para alimentarse solo llevaba un termo con sopa y una lata con zumo de tomate.
En su viaje no sólo impuso la nueva marca de hacer un vuelo en solitario en el Atlántico, también fue la primera persona en hacer esta hazaña dos veces, siendo a su vez la merecedora del récord por recorrer la distancia más larga volada por una mujer sin parar y el récord de cruzar el Atlántico en menor tiempo.
