Gracias a la inmigración el rastafarismo se ha extendido por todo el mundo consiguiendo que este conjunto de creencias milenarias sea cada vez más aceptado tanto como un estilo de vida como una elección espiritual. De esta manera más allá de las populares rastas o dreadlocks, de la música reggae y de los colores verde, amarillo y rojo, el movimiento rastafari obedece a una iniciativa socio-cultural y religiosa que surge a principios de 1930.
Por lo anterior es posible identificar una serie de doctrinas, símbolos, ceremonias, vocabulario y directrices políticas que conforman esta corriente y que muchas veces no son respetadas como se merecen, esto casi siempre debido al desconocimiento de lo que para muchos es definitivamente sagrado.
Algunos aspectos del movimiento rastafari
- Ceremonias: pueden distinguirse dos grandes estilos de ceremonias rastafaris, por una parte están Los Binghis que corresponden a celebraciones que pueden extenderse por varios días protagonizadas por cantos, danzas y fuma de hierba, asimismo se distinguen Los Razonamientos, espacios donde se llevan a cabo intercambios de ideas sobre aspectos sociales, políticos y religiosos.
- Políticas del movimiento: además de condenar todos los tipos de racismo, señalan con gran ahínco a los homosexuales y muchas veces optan por perseguirlos.
- El idioma: en cuanto al lenguaje el inglés es el que marca la pauta, también puede encontrarse el criollo o patois, este último es una especie de fusión entre el inglés, los lenguajes europeos y el africano.
- Simbología: el cannabis es llamado Ganja y fumarlo se entiende como un medio para meditar y conectarse espiritualmente, las trenzas rastas y la bandera son otros grandes símbolos.