La enfermedad conocida como patología de von Recklinghausen, es una enfermedad congénita que producen crecimientos anómalos del tejido nervioso mejor conocidos como neurofibromas, que son blandos, que aparecen progresivamente en la piel, y otras partes del cuerpo, de ahí surge el origen de la neurofibromatosis.
Estos neurofibromas son tumefacciones que ocurren en las células de Schwann que producen mielina y demás células que sostienen los llamados nervios periféricos, que están fuera del cerebro y de la médula espinal que hacen parte del sistema nervioso.
Síntomas en el origen de la neurofibromatosis
Los síntomas son difíciles de percibir, pero comienzan a aparecer bultos debajo de la piel, en la cercanía de los nervios, está exploración debe hacerla el médico para determinar la presencia de los mismos, las manchas de color café en la piel son un síntoma que aparece en la adolescencia, y ocurre en zonas como el pecho, la espalda, la pelvis y estas manchas van creciendo generando problemas en el esqueleto y problemas mayores como la cifoscoliosis.
Tratamiento
La enfermedad tiene un progreso imparable y no se puede curar, con la cirugía se puede extraer los tumores y se puede disminuir el tamaño o cantidad de radioterapia que debe aplicarse al paciente, si están muy cerca de algún nervio se debe extraer el nervio también para evitar complicaciones, y quienes sufren de está enfermedad tienen la posibilidad de transmitir el problema a sus hijos, ya que es altamente hereditaria y se debe pensar antes de procrear.
