Dormir no solo es una manera de adelantar el tiempo en nuestras vidas. Mientras dormimos, nuestro sistema realiza muchas funciones básicas y recupera energía que fue consumida a lo largo del día. No solo se obtiene esa sensación de descansado, sino también se mejora la capacidad de memoria a corto plazo. Pero ¿Qué sucede al dormir poco?
Sea por el trastorno del insomnio o por la apnea del sueño, muchas personas cuentan con pocas horas de sueño al día; incluso muchos otros cuentan con esto debido al estrés del trabajo o a ocupaciones durante las horas comunes de sueño. Esto crea un desbalance en nuestro reloj interno.
Consecuencias de dormir poco
Primeramente, las necesidades fisiológicas crean grandes conflictos en el organismo si no se combaten, es el caso del sueño. Al dormir poco o incluso no hacerlo, se pierde drásticamente la habilidad de concentración y el estado de ánimo de las personas se ve desmejorado.
Estas afecciones en menor grado pueden llevar a la depresión o la ansiedad en personas susceptibles pero; a mayor grado, cualquier persona pierde su capacidad de reconocer el estado físico y real del espacio y el tiempo.
Casos como El experimento del sueño ruso evidencian las reacciones progresivas de un individuo sometido a la falta de sueño. El deterioro progresivo de las funciones básicas de la persona es drástico y se puede convertir en un daño permanente en personas sometidas a períodos muy extensos de falta de sueño.
¿Cuánto es recomendado dormir al día?
Normalmente se dice que ocho horas al día son suficientes para cualquier persona. Eso es una medida general, ya que existen escalas de horas de sueño según la edad del sujeto. Pero esta escala va disminuyendo a medida que se aproxima la adultez manteniéndose siempre por encima de seis horas.
